Las escuelas españolas destinan poco tiempo y recursos al juego infantil

“Es necesario que las escuelas aprovechen el juego y el juguete como medios para enseñar porque atraen a los niños y, con ellos, éstos se esfuerzan mucho más para aprender”, ha declarado hoy el catedrático de Teoría de la Educación de la Universidad Complutense de Madrid, Gonzalo Jover, en la presentación del estudio ‘La presencia del juego y el juguete como recurso pedagógico en los colegios de educación primaria’, impulsado por el Observatorio del Juego Infantil y la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ).

Petra María Pérez, catedrática de Teoría de la Educación de la Universidad de Valencia y miembro del Observatorio del Juego Infantil, “la cuestión es que la escuela es un lugar donde van fundamentalmente a aprender, pero es el único sitio donde se encuentran con iguales y, por otro lado, se ha reducido el tiempo y los espacios para el juego. Una de las principales consecuencias de todo ello es que los niños quieren ser adultos muchos más temprano y abandonan el juego antes por lo que pierden muchos de los beneficios del juego como la transmisión de valores, la solidaridad, la cooperación, la competencia emocional y social, y el respeto a la norma. Pérez concluye que “el juego es una gran fuente de creatividad y nuestro país necesita niños creativos”.

Según el profesor de la Universidad de Navarra especializado en la infancia y tecnologías y también miembro del Observatorio del Juego Infantil, Xavier Bringué, “estamos ante una generación ‘multi’ que son capaces de hacer muchas cosas a la vez. No hay que olvidar que los niños siempre están jugando, quieren relacionarse y comunicarse, pero juegan diferente a lo que hacíamos nosotros los adultos. Una hoja de word o de excel o un programa informático puede convertirse en un juego y esto hay que también aprovecharlo en el entorno familiar y escolar”.

Experiencias de la introducción del juguete en las escuelas han sido explicadas por el profesor de la Universidad de Valencia y miembro del Observatorio, Andrés Payá, como por ejemplo “explicar física mediante los movimientos de rotación y traslación de una peonza o la experiencia de introducir el ajedrez como asignatura optativa que fue llevada al Senado en 1995”.

Finalmente, Imma Marín asesora pedagoga e integrante del Observatorio ha explicado la necesidad de aprovechar el patio del colegio como espacio pedagógico. En este ámbito, Marín coincide con Jover, autor del estudio, que el patio es un gran recurso que hay que aprovechar para la recuperación de los juegos tradicionales que pueden transmitir valores como la convivencia, la reutilización y el reciclaje, la cooperación y el respeto con los amigos.

Una de las razones por las cuales se ha constituido el Observatorio del Juego Infantil y se ha impulsado el estudio es la observación realizada por Naciones Unidas en la que insta a España a trabajar para que se garantice el derecho universal del niño a jugar. La ONU valora positivamente los esfuerzos realizados en este campo con el Plan Nacional de la Infancia y la Juventud (2006-2009) pero concluye que éste es insuficiente para garantizar este derecho. España impulsa en estos momentos un nuevo plan para que escuelas y familia amplíen sus espacios, tiempos y recursos dedicados al juego.